¡Hola! Otro año más que subo un pequeño balance de lo que ha sido mi año 2023. Como no podía ser de otro modo, lo escribo varios meses tarde (¡tres meses!). No por ello deja de ser menos válido.
👨💻 Lo del desarrollo
El año 2023 comenzaba asistiendo a Bilbostack. A pesar de que ya casi no voy a eventos, me apetecía echar un vistazo por allí. Lo tengo cerquita de casa y la ocasión merecía la pena.
El encuentro está bastante guay. Se habla sobre tecnologías de todo tipo (tanto back como front) y siempre aprendes algo nuevo, aunque no sea necesariamente tu especialidad.
Otro evento al que pude asistir, de manera virtual, fue a la MiduConf. Me gusta también que este tipo de cosas se hagan online de vez en cuando. Aunque sigo prefieriendo asistir presencialmente, en otras ocasiones es divertido hacerlo desde casa.
En cuanto a desarrollo web, en lo personal, siento que he crecido. A pesar que aún me quedan infinidad de cosas por aprender, soy capaz de afrontar los problemas desde otra perspectiva. Mucho más pragmático.
Aunque quizá sea la edad, quién sabe.
🎤 Lo de los podcast
En cuanto a podcast: sigo bastante "en mis trece". No alterno mucho y soy poco abierto a la hora de escuchar programas nuevos. Esto no quiere decir que no haya encontrado alguno que merezca la pena.
Es el caso de Nintendatos. Una joya de Nacho Bartolomé en donde nos cuenta curiosidades, efemérides y datos sobre Nintendo. Me he sentido apenado cuando anunció que lo pausaba indefinidamente a principios de este año.
Otro de los podcast que ahora se ha convertido en unos de mis referentes (quizá por sus presentadores) es Monos Estocásticos. Disfruto enormemente escuchar a Antonio y Matías (tecnólogos, crossfiteros y mejores personas) hablar sobre inteligencia artificial con tanto desparpajo y humor.
🎧 Lo de la música
Aquí tengo mucho que contar. No porque haya escuchado muchísima música, que también, sino porque he podido asistir a muchísimos eventos en directo este año:
- Pude ver a Bifäz en Redneck Brewery, en Reocín.
- Mis amigos de Eretia tocaron en el Espacio Creativo J.M Illera.
- Asistí a la segunda edición de Dobra Fest. Disfruté como un crío con Zaborra.
- Vi a Medussa y Azure en Ítaca. Qué puedo decir, post rock en Torrelavega ♥️.
- Pude ver a Uruna en la Lleldería. Un día increíble.
- Asistí al Cabuérniga Folk. Con un despliegue de medios incomparable al de la edición anterior.
- Asistí como cada año al Torrelavega SoundCity.
- San Migueluco, en Los Corrales. Con Bifäz en los escenarios de nuevo.
- Nansa Fest, su primera y espero que no última edición.
- Por primera vez en Torrelavega (creo) Verduleras Fest. Un evento que me gustó especialmente.
- Volví a presenciar a Rodrigo Cuevas presentando su nuevo disco: "Manual de romería".
A parte de todo esto, en el Espacio Creativo J.M Illera han ido realizando concierto por mes. Creo que he ido a casi todos. No dejo de pensar en cuánto me gusta ver música en directo en mi ciudad y que, además, pueda asistir andando o bicicleta. Calidad de vida.
En cuanto a lanzamientos. Este año ha sido especialmente folclórico. Uruna estrenaban "El primeru", Casapalma sorprendía con "Montañesas" y Rodrigo Cuevas con "Manual de Romería".
Esto no quiere decir que haya dedicado atención a otras bandas. Si tuviese que hablar de una sería, indudablemente, Delta Sleep. Durante todo el año he encontrado muchísimo refugio en ellos, tanto en su música como en sus letras.
👾 Lo de los videojuegos
Este año ha sido guapísimo en cuanto a videojuegos. No soy una persona especialmente jugona (puedo estar meses sin tocar una videoconsola), pero por diversas razones pude tener unos meses de juego intensos.
Comenzaba terminando Ori and the Will of the Wisps. Aunque me gustó más su primera parte, éste ha sido también una experiencia increíble en todos sus sentidos. Meses más tarde terminaba Mario + Rabbids: Spark of hope (ñé) y Zelda: Tears of the Kingdom, que me pareció brutal.
De lo más interesante este año ha sido que mi amigo Tomás pudo dejarme su PS4. Tenía varias deudas pendientes con esta consola y quería saldarlas cuanto antes. Una de ellas era The Last of Us, tanto su primera parte como la segunda. Me han parecido juegos sobresalientes, entiendo que la crítica les tenga en tan alta estima.
No obstante, los que me conocen saben que me gustan los juegos que se desmarcan un poco de los cánones generales. Es por eso que una de esas déudas tenía que ver con Fumito Ueda. Y es que llevo años queriendo jugar tanto a Shadow of the colossus y The Last Guardian. Por fin pude hacerlo.
Shadow of the Colossus
Ambos juegos me han parecido experiencias que van más allá de lo jugable. En Shadow of the colossus he encontrado una sensación de inmensidad (no espacial) inigualable mientras cabalgaba a lomos de Agro.
The Last Guardian
En cambio con The Last Guardian la sensación ha sido más personal. Algo así como un viaje de introspección que se ve mezclado con la amistad que de da entre el protagonista y Trico; la bestia que nos acompaña durante la aventura. Las voces en off, la ambientación, la banda sonora, su apartado artístico... no sabría con cuál quedarme.
Stray
También me gustaría destacar Stray. Ese juego de Annapurna que nos mostraba las andanzas de un gato en una ciudad más o menos de ambiente cyberpunk, pero sin presencia humana aparentemente. Al ser exclusivo, no me quedó más remedio que jugarlo también.
La verdad que esperaba que me gustase, pero no que me gustase tanto. Diría que es de los mejores juegos en cuanto a ambientación he podido probar. Tanto la historia como ese mundo creado alrededor de una ciudad sumida en la total oscuridad me ha encantado.
Para ir terminando, no puedo dejar de lado Super Mario Wonder, Blasphemous II o TUNIC. Siendo estos dos últimos auténticas joyas, sobretodo la edición especial de TUNIC.
🌵 Lo demás
En general ha sido un año bastante bueno. Si bien sigo pensando que podría haber mejorado en algún aspecto, creo que me sale "a devolver".
30 días en Bici
Hay varios eventos que podría destacar, pero uno de ellos es sin duda 30 Días en Bici, en Torrelavega. Gracias a Sara pude poner en el calendario durante abril una serie de eventos que me permitieron organizar esta iniciativa que tanto me gusta:
- En Twitter dejé un hilo donde muestro cómo uso mi bicicleta durante esos treinta días.
- Se hicieron dos conferencias relacionadas con la movilidad en bicicleta en Torrelavega.
- Mesas de movilidad de Cantabria, por Javi Polanco.
- Periquitos, bombas y grandes fusiles: ciclismo y alcohol en la historia, por Marcos Pereda.
- Se realizó una serie de "Libros sobre ruedas".
- Pudimos ver el Museo Vicente Trueba.
- Asistimos al Centro de Interpretación de La Industria de Cantabria.
Me siento bastante contento de haber podido llevar esto a cabo ya que nunca había organizado nada de este calibre. Conocí a varias personas, entre ellas Roberto Noriega, que cuida y mantiene el Museo Vicente Trueba. Él me dio un consejo que guardaré para mí y que me motivó a querer seguir "haciendo cosas".
El resto de cosas podría resumirlo en un listado:
- Viajé a Austria. Aunque es bonito, nada que envidiar a nuestra Montaña.
- Pude ver a La Ruina. Muy divertido.
- Mi abuelo, a pesar de haberse ido hace años, me hizo un último regaló: su bicicleta.
- Vi Super Mario Bros: La película. Me gustó bastante.
- Me compré una bicicleta nueva: Sarmiento.
- Pudimos ver la exposición de "La Barraca de García Lorca", en la Casona de Tudanca.
- También vimos la exposión de xilografía de "Las Ratas", de Delibes. En Torrelavega.
- En 2023 hemos comprado muchos libros de bicicletas. Muchos.
- El Bolao, de Cóbreces. Aunque ya lo conocía lo he redescubierto este año.
- Volví a cortarme la coleta.
- Pude visitar Zarautz.