Cada vez tardo más en escribir este pequeño resumen de lo que ha sido mi año, diría que es una tradición ya. Bien por desgana, bien porque prefiero dedicarme a mis cosas. No obstante, lo tengo siempre en mi cabeza como algo totalmente indispensable para mi web.
Mejor voy por partes:
👨💻 Lo del desarrollo
En este 2022 no he avanzado todo lo que sí me hubiese gustado. He andado jugueteando aquí y allá con plataformas como pueden ser Contentful o ContentStack. He descubierto algún que otro framework CSS como Chakra, he cerrado un proyecto que inicié en 2020 (sólamente compré el dominio) al que llamé setups.tech, con él pretendía aprender y crear una especie de comunidad en base a escritorios o set-ups.
Apenas he escrito en mi blog y no he dedicado tiempo a formarme lo suficiente. Muestra de ello es esta entrada, que escribo en abril mayo, cuando debería haber sido como mucho en enero. En general, creo que podría haberlo hecho bastante mejor.
No obstante, hubo cosas increíbles.
Pude asistir por primera vez a un congreso internacional de desarrollo web en Ütretch (Países Bajos) llamado Fronteers. Una confererencia donde se habló de tipografía fluida, CSS nivel nigromancia, accesibilidad, privacidad y mucho más. Algo de lo que me siento cada vez más orgulloso es de poder hablar en inglés sin ataduras, con la suficiente confianza para equivocarme y que no me preocupe demasiado por ello, quitando esa verguenza a veces incomprensible.
También he tenido la oportunidad de cambiar de teclado. Aunque esto quizá suene raro, en el mundo del desarrollo web hay una gran cantidad de personas que les encanta esto: cambiar switches, teclas de colores, crear teclados desde cero... en mi caso, al ser mi primer teclado mecánico que tengo, opté por la compañía Nuphy, con una configuración de 75 teclas. De hecho, escribí sobre ello hace unos meses.
Por lo demás, afronto este año con energía, mirando de reojo al pasado para no cometer los mismos errores.
🎤 Lo de los podcast
En cuanto a podcast tampoco he innovado bastante. Me sigo encontrando muy cómodo escuchando lo mismo de siempre. Al fin y al cabo la rutina me ha llevado por ahí. Aún así, he consumido bastante contenido de podcast en vídeo. Estirando el chicle, Buenismo bien y Horaveintipico sería lo más destacado durante este año.
🎧 Lo de la música
En lo musical tengo varias cosas que decir. He visto a Rodrigo Cuevas, Baiuca, Viva Belgrado y Envy. He podido asistir a varios conciertos durante en año presencialmente, algo que había perdido y que por fin he podido recuperar. No he parado de escuchar Delta Sleep y he descubierto bandas nuevas como Casapalma y Uruna. A Wilhelm Scream sacaron disco y he descubierto un álbum de 1976 titulado Plantasia (gracias a mi amigo César), dedicado integramente a las plantas. Además de todo esto, he diseñado un vinilo para mis amigos de Eretia.
👾 Lo de los videojuegos
El año lo empecé con una noticia alucinante, llegó a mis oidos un curso de la UNED titulado: "Experiencias de juego en educación: Los videojuegos como productos culturales y artísticos con posibilidades educativas". No tardé en apuntarme para asistir presencialmente. Allí es donde conocí a Jorge Oceja, un apasionado por la educación y los videojuegos, donde nos enseñó, entre otras cosas, las diferentes formas de narrativa que hay hoy en día a través del videojuego, haciendo enfasis en Braid y GRIS como protagonistas.
Además, unos meses mas tarde, tuve la oportunidad de asistir también a otra de sus charlas: "Videojuegos: posibilidades para el desarrollo emocional y social", en esta ocasión organizado por UNATE. Conocer a Jorge y ver la pasión que siente por los videojuegos y la divulgación fue una de las mejores cosas de 2022.
En lo que a videojuegos puro y duro se refiere. Estoy muy contento por lo jugado:
Pokemon Arceus, bastante bien. Me encanta cómo ha sido resuelto el hecho de poder capturar sin necesidad de una batalla. Creo que allana el camino para lo que está por venir.
Ni No Kuni II, horrible. Una decepción. Ya desde el principio intuía que algo pasaba con la esencia de Ghibli en este juego. Una sucesión de misiones secundarias, cada cual más tediosa (ve a buscar 20 cerezas al bosque), hicieron que dejase de jugar tras unas 25 horas.
Inside, qué puedo decir. Playdead han sabido elevar el listo que dejaron con Limbo. Sublime.
Celeste, una de las joyas de la corona. Todavía no salgo de mi asombro cómo una puñado de píxeles junto con una banda sonora colosal son capaces de levantar tantas emociones. Escribí una pequeña nota en mi blog sobre ello.
Eastward, otro de los grandes de este año. Ya no sólo por su apartado artístico y sonoro. La historia y la jugabilidad son suficientemente buenas para que las 25 horas que estuve jugando se me pasasen volando.
Por último, no puedo dejar de lado a pirata más temible del caribe, con el que he pasado horas mirando una pantalla en busca de una solución. Return to Monkey Island, el clásico juego de Ron Gilbert hizo aparición a mediados de año sin que nadie lo esperase. A pesar de su criticado aparado artístico, el cual a mí me parece brutal, el juego ha logrado hacerse un hueco en mi memoria a largo plazo. Estoy totalmente seguro que dentro de unos años lo recordaré con el mismo cariño que cualquier otro de sus títulos pasados.
Para no alargarme más, también he podido jugar a Figment, Chasm , Hyrule Warriors y Triangle Strategy. ¡Ah!Y he construido una caña de pescar con Nintendo Labo.
🌵 Lo demás
Nuestro primer año completo en casa. Desde primavera hasta invierno. Hemos pasado frío y calor a partes iguales. He ido a Biarrizt y merece bastante la pena, a tres horas de casa y muy bonito.
He pasado por varias etapas con la bicicleta, de querer una eléctrica a una plegable a querer una eléctrica plegable. Tras haber probado varias llegué a la conclusión de: "lo mejor una mecánica, de toda la vida".
- Sara realizó una exposición sobre la Vijanera, en Torrelavega. Bastante potente y bonita.
- Este año conduje lo que podría ser una camioneta por primera vez. Me quedo con mi bici.
- En Incentro hemos estrenado oficina. Enorme y muy equipada.
- El almuerzo holandés está buenísimo.
- Acabé la Saga de Geratl de Rivia, por fín. Qué buen final.
- Fué la primera vez que vi cómo pinaban la maya de Silió.
- He ido a dos exposiciones de tipografía en Torrelavega. Lo nunca visto.
- He comprado (y me han regalado) literatura de videojuegos.
- Hicimos un viaje a Potes y fuí a Picos de Europa de ruta.
- Descubrí que hay una exposición de fotografías donde aparece mi abuelo, Pepe, como parte del equipo de construcción del teleférico. En Fuente Dé.
- Sara terminó su proyecto de museo de Llamas de la Ribera: GUIMA.
- Cambié de teléfono tras 5 años. ¿Es algo de lo que estar orgulloso?
- Cambié de reloj y compré un Apple Watch. Ya tengo la suite completa
- Vi una exposición de José Ramón Sánchez que me voló la cabeza.
- Sara colaboró en la creación de un juego de cartas de La Vijanera
- Fui a jugar Airsoft. La experiencia más cercana de estar dentro de Half-Life/Counter Strike.
- Por fin: mascarillas fuera.
- Fuimos a Tudanca y vimos su casona. Jamás habría dicho que está eso ahí.
- ¡Me casé!